Cuerpo y Creación. Ciclo de talleres de Arteterapia y Trabajo Corporal
¿Cómo miro mi cuerpo? ¿Qué tal me encuentro viviendo en él? ¿De qué manera siento que me ven los demás?
¿Cómo impacta en mi cuerpo la culpa? ¿Qué me pasa cuando siento envidia? ¿Cómo recibo el sentimiento de soledad? ¿Cómo me responde el cuerpo ante la vergüenza? ¿De qué forma se manifiesta la ira?
En este ciclo de talleres miraremos de frente a aquello que se interpone al placer, nos limita la vida y nos impide disfrutar.
El cuerpo será la vía de acceso para desvelar qué hay detrás de todas estas emociones que, en mayor o menor medida, se nos han presentado a todxs.
La creatividad será el bálsamo para explorar de una manera acogedora y, quizás, para encontrar respuestas que nos ayuden a ser más conscientes y más espontáneas y que nos liberen (aunque sea un poquito) del miedo a la mirada ajena, sin saltarnos la mirada propia.
DÓNDE Y CUÁNDO:
Los talleres se realizarán en formato presencial en Madrid (Metro Tetuán o Valdeacederas, Línea 1).
Tendrán lugar un viernes al mes de febrero a junio, en horario de tarde, de 18:00 a 21:00 horas:
PRECIO: 35€ cada taller. Se realizará un descuento en el último taller para las personas que asistan al ciclo completo.
A TENER EN CUENTA: Traer ropa cómoda y, a ser posible, manchable. Recomendable un cuadernito para tomar notas sobre la experiencia.
+INFO E INSCRIPCIONES:
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- 605417086 (Marta) / Instagram DM @marta_buceadora
- 686190035 (Isa)/ Instagram DM @isa.jardin
Imprescindible reservar plaza
VERGÜENZA
¿Alguna vez has sentido vergüenza por mostrarte? ¿Cómo reacciona tu cuerpo ante esta emoción? ¿Recuerdas la primera vez que la sentiste? ¿Podrías recrear lo que pasó? La experiencia de la vergüenza suele ser delicada, además de resultar poco acogida y poco comprendida. La vergüenza puede alejarnos de nuestra verdadera voz y, por tanto, de nuestros deseos y necesidades. Pero, ¿cuál es el origen de esta vivencia? ¿Qué es lo que pretendemos ocultar tras esta incómoda máscara? ¿Qué es lo que nos ha llevado a tener que escondernos de esta manera?
El cuerpo será el que nos guíe, nuestra herramienta de exploración. El arte y la creatividad nos ayudarán a dar sentido a lo que nos pasa.
ENVIDIA
¿Qué imágen tienes de una persona envidiosa? Quizás has oído expresiones como “a esa lo que le pasa es que tiene envidia” o “aléjate de la gente envidiosa”. Estas frases colocan a la envidia como un rasgo más que como una experiencia emocional temporal, además de demonizar a quien la siente. ¿Y si quien siente envidia eres tú? ¿Qué te pasa entonces por dentro y por fuera? ¿Qué sueles hacer con la envidia? ¿Hablas sobre ella o la ocultas como un terrible secreto? ¿Cómo reaccionarías si alguien te dijera que te envidia?
La envidia, otra de las experiencias delicadas, en gran parte por estar silenciada y penalizada en sociedad. ¿Cómo vamos a darnos el permiso de sentir esta emoción si la envidia es de brujas y de malas? Y, para rizar el rizo, ¿cómo no vamos a sentir envidia si hemos sido educadas en la competición y el individualismo? En este taller podremos mirar a la envidia de frente desde lugares nuevos, darle la vuelta a la tortilla y cambiar de perspectiva las veces que haga falta. Empezaremos observando qué nos pasa en el cuerpo con esta emoción, y desde ahí podremos ir tirando del hilo. ¿Dónde nos llevará? Donde quieran la creatividad, el arte y el proceso creador.
CULPA
Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa. ¿Qué es este tormento que no me deja dormir y que cargo a mis espaldas? ¿De quién es esa voz que me acusa de ser mala y me amenaza con castigos? ¿Viene realmente de mí? ¿Acaso viene de fuera y nos grita a todas cada vez que sacamos un piececito fuera del tiesto?
En este taller podremos dejar a un lado los tiestos y abordar directamente los juicios, las culpas y los castigos. Como siempre, empezaremos preguntando al cuerpo. ¿Cómo se siente y dónde se alberga? ¿Cómo y cuándo ha llegado la culpa hasta mí? Y, una vez ubicada, ¿qué podemos hacer con ella? Crear, explorar, compartir. El arte nos ayudará a transformar lo necesario.
IRA
La ira, junto con el amor y con el miedo, es una de las emociones consideradas básicas o primarias en el desarrollo humano, esto es, se experimenta en la temprana infancia y no es fruto de la combinación de otras emociones. Aparece naturalmente para proteger nuestra integridad y nuestros intereses. ¿Recuerdas haber sentido esa ira cuando eras pequeñx? ¿Cómo fue tratada? ¿Cómo se fue desarrollando desde entonces? ¿La identificas en ti actualmente? ¿Cuál es el espacio que le otorgas?
Muchas han sido las voces iracundas que se han acallado, ridiculizado, menospreciado, invalidado y castigado (casi siempre, voces de mujeres). “Calladita estás más guapa”, “una chica buena no se enfada así”o “te pones como una histérica” son clásicos en lo referente a la ira y las mujeres. Locas, brutas, ridículas, inútiles, nos vamos a quedar solas o nadie nos va a querer así.
En cambio, en el caso de los hombres, la ira tiene otro valor a nivel histórico, social y cultural. ¿Cuál es tu caso? ¿Cuál es tu historia? ¿Cómo es tu ira y cómo la miras? Empecemos por el cuerpo y sigamos con el proceso creativo. Vamos a sacar nuestra ira y explotar sus posibilidades…quizás encontremos grandes tesoros.
SOLEDAD
La soledad. El vacío, agujero negro, ese lugar que parece que todxs evitamos. El gran miedo.
Pero, ¿y si tiene otra cara? La cara de un bosque que solo tú conoces y que puedes desplegar a tu alrededor para volver a replegarlo cuando quieras. La cara de la serenidad que nos coloca en nuestro centro y evita que nos desparramemos ante la mirada ajena. La de la responsabilidad y la libertad de llevar nuestra vida como nos dé la gana. La cara de la soledad que nos dice “solo no puedes, pero solo tú puedes”. Es la clave de la madurez. Solo tú puedes atravesar tus procesos, solo tú tienes que vivir tu historia, nadie va a hacerlo por ti.
En este taller observaremos la soledad como la conexión con nuestro núcleo, con nuestra esencia más verdadera, con nuestrx niñx interior que no necesita entender porque le basta con saber. Empezaremos una vez más desde el cuerpo. ¿Dónde albergamos el núcleo? Desde ahí, la soledad será una conquista. El arte será la herramienta para construir nuestro espacio seguro.
